Oved, un líder humanista que da resultados en la Sección 40
La nueva dinámica que se visualiza al interior del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, Sección 40 de Chiapas, sin duda demuestra el trabajo arduo y profesional que ha emprendido la dirigencia.
Desde los tiempos del innombrable yucateco que vino a robar a Chiapas y quien se aprovechó de la pandemia para ampliar su gestión y desviar a sus anchas los recursos de cientos de trabajadores de la educación del estado, el sindicato no había experimentado un cambio progresivo.
Hoy los resultados están a la vista: un gremio más unido que nunca, con bases sólidas en los planteles, sin protestas generalizadas y masivas como las que se daban en el pasado. La gestión de Obed Balderas Tovilla es sinónimo de confianza y resultados.
El líder sindical ha sabido adentrarse en las entrañas de la Secretaría de Educación y del Instituto de Seguridad Social de los Trabajadores del Estado de Chiapas (ISSTECH) para lograr recuperar adeudos que venían arrastrándose desde hace casi una década. Su labor política sorprende no solo por el éxito de sus gestiones, sino también por su habilidad para posicionarse entre los sindicatos que el propio gobernador Eduardo Ramírez Aguilar ha reconocido como un baluarte para recuperar el rezago educativo heredado.
No es para menos que el actual líder de la Sección 40 sea un referente en las reuniones del sector educativo. Tampoco sorprende que hoy los trabajadores hayan recuperado la confianza en su representante sindical.
Este año que está por terminar ha sido de logros que han devuelto sonrisas a miles de maestros. El pago de adeudos en los diferentes niveles del sistema básico es el mejor ejemplo.
Apenas hace un par de días, el sindicato anunció la entrega de cheques a más de un centenar de familias que tenían retenido el pago del seguro de vida correspondiente a maestros que ya fallecieron.
El hecho no es menor, pues había casos en los que la negligencia burocrática era el factor principal del rezago de los trámites durante años. Esto es lo que realmente le da valor a la función sindical, y eso debe reconocerse.
Muchos dirán que es una obligación para la cual fueron elegidos, pero hay quienes estuvieron en la misma posición y nunca movieron un dedo. Esa es la diferencia.
Oved Balderas Tovilla tiene el tacto para acompañar las causas sociales y justas de sus beneficiarios. Su respaldo y su postura de que el Sindicato continuará atento a las necesidades del magisterio y de sus familias lo posicionan como un profesional que hace honor a la política social de la nueva era: privilegiar el humanismo.
Que ratifique públicamente su compromiso de dar siempre respuesta a todos los trámites y gestiones, y sobre todo de brindar la atención que merecen las maestras y los maestros, merece el reconocimiento del gremio y, al mismo tiempo, se convierte en un ejemplo para los funcionarios que integran la actual administración pública estatal.
Llama la atención que el sindicato haga públicas las tareas de brindar información a todas las delegaciones que existen en la entidad.
La base trabajadora se ha dado cuenta de que hay líderes y líderes, y quizás por ello hoy muchos estén adelantándose a pensar que la reelección en este sindicato sí vale la pena.
La educación lo merece todo, y sus trabajadores maestras y maestros que privilegian las aulas antes que las protestas estériles merecen todo nuestro respeto.




