En un hecho que marcará con letras mayúsculas la historia de la educación
superior en el estado, el Congreso del Estado de Chiapas aprobó por mayoría una
reforma al artículo 104 de la Constitución Política local para conferir a la
Universidad Autónoma de Chiapas el título honorífico de «Benemérita»,
reconociendo su papel como referente educativo, científico y humanista en la
región sur-sureste del país.
Con esta distinción, la denominación oficial de nuestra casa de estudios será:
Benemérita Universidad Autónoma de Chiapas, en apego al acto legislativo
promovido por el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar y respaldado por todos los
grupos parlamentarios. Sin embargo, es importante precisar que esta reforma no
debe modificar las siglas institucionales que históricamente nos han identificado:
UNACH debería continuar siendo la forma abreviada reconocida nacional e
internacionalmente, y seguirá usándose en toda comunicación institucional,
académica y administrativa, precedida siempre del nombre oficial completo.
Este criterio sigue la misma práctica adoptada por otras universidades mexicanas
que han sido distinguidas con el título de Benemérita, el caso de la Benemérita
Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) sí adoptó el cambio de siglas no así la
Benemérita Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA), cuyos acrónimos se
han mantenido por su reconocimiento histórico y funcionalidad. En ese sentido,
UNACH no es solo una sigla; es una identidad construida colectivamente durante
cinco décadas de compromiso con el desarrollo de Chiapas.
El nombramiento de Benemérita es un reconocimiento que va más allá del
simbolismo: respalda la trayectoria, la excelencia académica, la vocación de
servicio y el impacto social de la UNACH. Desde su fundación en 1974, la
universidad ha sido formadora de generaciones de profesionistas que han
transformado realidades en las zonas urbanas y rurales, en los territorios
indígenas, en los espacios de investigación, salud, ciencia, cultura, tecnología y
gestión pública.
Durante la ceremonia solemne realizada en el recinto legislativo, el rector Dr.
Oswaldo Chacón Rojas subrayó que esta declaratoria “no sólo llena de orgullo a la
comunidad universitaria, sino que la inspira a seguir adelante con una visión
humanista, inclusiva y transformadora”.
En sus palabras, se destacó que “la historia hoy nos vincula con un acto de
justicia”, recordando que la UNACH ha sido desde su origen un puente de acceso
al conocimiento, la movilidad social y la esperanza para miles de jóvenes
chiapanecos.
A 50 años de su creación, la UNACH se transforma para enfrentar los retos del
presente con un nuevo modelo educativo, con una apuesta clara por la tecnología,
la interculturalidad y la innovación social. En este contexto, el nombramiento de
Benemérita no representa una ruptura, sino una reafirmación de su esencia: la
universidad pública, autónoma y comprometida con Chiapas que honra su historia,
pero también se proyecta hacia el futuro.
El uso del término «Benemérita» en adelante será parte del nombre oficial
completo, como lo establece la reforma constitucional. En toda documentación y
espacios formales, se usará la expresión Benemérita Universidad Autónoma de
Chiapas (UNACH), reafirmando así la continuidad de nuestra identidad
institucional y la evolución de nuestro legado.
En este año de conmemoración, la comunidad universitaria celebra este justo
reconocimiento como una señal de que el trabajo bien hecho deja huella. La
UNACH, ahora Benemérita, refrenda su compromiso con la excelencia académica,
la equidad, el desarrollo regional y la transformación social.