Jorge Pérez Pólito
El investigador de la Universidad Autónoma de Chiapas (UNACH), Vicente Castro Castro, calificó de triste que Tapachula, que es la segunda ciudad más importante del estado, siga sin personal de la Secretaría de Medio Ambiente e Historia Natural (SEMAHN) y que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), haya retirado a su personal y concentrado en Tuxtla Gutiérrez.
Recordó que aun cuando públicamente el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar ha manifestado la meta de recuperar 200 mil hectáreas de Áreas Naturales Protegidas (ANP) en la entidad, el no contar con delegaciones de ambas dependencias en la cabecera regional del Soconusco, además de triste es preocupante.
Dijo que esta situación no permite siquiera considerar que esa buena voluntad del mandatario chiapaneco lleve a recuperar y rehabilitar terrenos invadidos en ANP, como por ejemplo “El Cabildo Amatal” ubicado en Tapachula, zona sujeta a conservación ecológica y humedal de importancia internacional (sitio Ramsar 1771), que aún resguardan especies emblemáticas como el Pejelagarto, la Nutria, tres especies de tortugas de aguas continentales, entre otras.
Sin embargo, señaló, la nula protección que los gobiernos federal, estatal y municipal proporcionan a esta Área Natural Protegida ha permitido invasiones, las cuales se siguen dando actualmente, además de quemas, tala de mangle y caza ilegal, entre otros ilícitos.
Castro Castro reiteró que es imprescindible que la actual dirección de Ecología municipal de la SEDURBE se fortalezca y transforme en el Instituto Municipal de Cambio Climático y Conservación de Recursos Naturales, que cuente con el personal y recurso suficientes para atender todas las responsabilidades ambientales que la Ley Ambiental para el Estado de Chiapas, en su artículo 5º le otorga a los Ayuntamientos.
