José Cancino
El gobierno de Guatemala informó sobre que reforzó la seguridad en su frontera con México, luego de que se diera a conocer la fuga de 20 pandilleros presos considerados «de alta peligrosidad», de la cárcel de Fraijanes en Ciudad de Guatemala.
El Ministerio de Gobernación señaló que esta operación no es sólo nacional, ya que se han activado los mecanismos de cooperación internacional, coordinación directa con Interpol y comunicación con autoridades del Salvador, Honduras y México.
“Como parte de la operación de búsqueda, se redobló la vigilancia en las fronteras terrestres y se desplegaron agentes para custodiar los perímetros de las prisiones del país”, señaló Gobernación.
El gobierno guatemalteco también anunció una recompensa de 150.000 quetzales por información que lleve a la captura de cada pandillero fugado.
De acuerdo a las autoridades, la fuga fue planificada, se llevó a cabo por grupos y habría contado con apoyo interno y externo.
“Mientras se investiga lo ocurrido, se destituyó al jefe del Sistema Penitenciario, Ludin Godínez, así como al director y al subdirector de la cárcel Fraijanes II”, apuntó en un comunicado.
La fuga de estos peligrosos pandilleros ha llevado al gobierno de Bernardo Arévalo a tener mas vigiladas sus fronteras con Chiapas, por los puertos fronterizos El Carmen – Talismán y Tecún Umán- Ciudad Hidalgo, así como muchos pasos informales por los cuales estos prófugos de la justicia podrían llegar a territorio mexicano.
Lo mismo se ha hecho en el punto de La Mesilla, aunque las autoridades chapinas declararon que se sigue una pista de posible huida de estos pandilleros hacia la frontera con Tecún Umán y El Carmen.
Estados Unidos declaró este hecho como inaceptable, luego de que el pasado 23 de septiembre declarara al Barrio 18 como «organización terrorista», meses después de hacer lo propio con la Mara Salvatrucha o MS13.
