Amilcar García
Ingresar al Centro Estatal de Reinserción Social para Sentenciados (CERSS) 07 Huixtla se ha convertido en un calvario para los internos y familiares, sobre todo los de nuevo ingreso, a quienes para no ser molestados les cobran de 15 hasta 20 mil pesos, algún las denuncias anónimas de afectados.
Los afectados que han decidido permanecer en el anonimato, mencionaron que todo indica son las mismas autoridades penitenciarios las que protegen a los que se dicen líderes en el interior de los módulos, mismos que se encargan de «recolectar» esos recursos económicos, que según son destinados para la compra de material de limpieza.
Sin embargo, todo ese dinero es repartido con los representes de ese reclusorio, por lo que esta red de extorsión debe ser investigada por la misma Secretaría del Pueblo.
Añadieron que la situación se pone tensa y preocupante, debido a que cuando les comienzan a exigir esas cantidades, los familiares del recluso tienen que reunir el dinero, de lo contrario, la integridad de su ser querido corre peligro.
Así también, indicaron que los casos generan desesperación en el interior de este centro penitenciario, pues constantemente son hostigados y a pesar que el director tiene conocimiento no actúa, por ello, consideraron que debe de intervenir la Comisión Estatal de los Derechos Humanos (CEDH), para que realice las líneas de investigación, ya que están aburridos de estas mañosas y malas acciones.
