José Cancino
El flujo de mercancías en el río Suchiate ha disminuido considerablemente, a consecuencia de la ausencia de compradores guatemaltecos que por la temporada de Semana Santa han dejado de llegar a Ciudad Hidalgo.
Los balseros de este río que divide que a México y Guatemala, señalaron que la caída en el traslado de mercancías ha propiciado preocupación, ya que decenas de familias subsisten por esta labor que genera ingresos a personas de ambos países.
Sin embargo, confiaron que en la recta final de esta semana y principios de mayo, el flujo comercial se recupere y con esto regresen las ganancias y sustento para ellos, ya que en días recientes apenas han logrado algunos traslados y muchos han decidido ausentarse ante la nula actividad.
“Toda la semana mayor estuvo bajo, así pasa todos los años, pero para la semana en curso ya debió de haberse visto más actividad y no está ocurriendo, confiamos en que la semana que viene, que ya trae consigo mayo, nos recuperemos porque esto nos indica que algo inusual está pasando”, señaló uno de los balseros.
A diario, cientos de guatemaltecos ingresan a Chiapas para realizar “turismo de compra”, como se le ha denominado a esta actividad.
El cambio de divisas, que da mayor valor al Quetzal sobre el Peso mexicano, permite a los chapines adquirir productos de la canasta básica y de otras categorías a mitad de precio de lo que costaría en su país.
De forma habitual los productos que más se adquieren en comercios de mayoreo en Ciudad Hidalgo, son alimentos enlatados y en embalaje como arroz, frijol y otros granos procesados. También productos de aseo personal y para el hogar, así como bebidas embotelladas que van desde sodas gasificadas hasta cervezas.
La mayoría de estos productos comprados a gran cantidad son transportados a distintas municipales de departamentos fronterizos de Guatemala, para la comercialización en tiendas de abarrotes y, en menos grado, para consumo propio de los compradores.
