Mario Caballero
Visita de la Presidenta: Un Reconocimiento a Era
A cada cosa, su nombre. La reciente visita de la presidenta Claudia Sheinbaum a Chiapas representa un claro reconocimiento a la gestión del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar.
Muchas veces, ciertamente, hemos sido testigos de las visitas de otros mandatarios del país a nuestro estado. Sin embargo, algunas fueron por una mera cortesía y no pocas por las evidentes complicidades que existían entre el presidente de la República y el gobernador en su momento.
Esta vez la situación es diferente. La presidenta Sheinbaum y el gobernador Eduardo Ramírez tienen una sólida relación política, objetivos comunes y una agenda de trabajo encaminada a detonar el desarrollo de Chiapas y de todo el sureste mexicano.
Prueba de ello son las obras que la primera mandataria inauguró el viernes pasado. No vino a tomarse la foto, sino a poner en marcha dos importantes proyectos que, por un lado, mejorarán los servicios de salud en favor de miles de chiapanecos y, por el otro, impulsarán la economía de la región.
LOS PROYECTOS
Empiezo por la obra inaugurada en Tuxtla. Se trata del Hospital General Regional de Especialidades “XIV de Septiembre” del IMSS.
Este hospital cuenta con 43 especialidades, seis quirófanos, 12 cubículos de parto amigable, el resonador magnético más potente de la entidad y una plantilla laboral de mil 691 personas, de las cuales 369 son médicos especialistas.
Asimismo, tiene 107 consultorios y 261 camas, 144 de las cuales son para hospitalización. Y con el trabajo del personal médico, junto con el de enfermería, asistentes médicas, higiene y limpieza, cocina, laboratoristas, técnicos, camilleros, químicos, entre otros, harán posible la realización de procedimientos médicos que antes no había en Chiapas y se podrá beneficiar a más de un millón 37 mil 900 derechohabientes con atención médica inclusiva e integral.
Chiapas ha sido ancestralmente una de las entidades más relegadas de la República y con la que el Gobierno Federal tenía una deuda histórica, misma que se veía reflejada en la marginación, pobreza y rezago en rubros como educación, servicios básicos, vivienda y, por supuesto, salud.
Sobre esto último, diversas fuentes informan que alrededor del 63.3 por ciento de la población chiapaneca no cuenta con accesos a servicios de salud públicos y privados. Se ha reportado, además, un retraso de más de una década en acciones de impacto en salud pública.
Por tanto, con esta obra que utilizó una inversión de más de dos mil 400 millones de pesos, el gobierno de Claudia Sheinbaum reafirma su compromiso con la salud pública, el empleo y el desarrollo con justicia para Chiapas. Y responde a una de las mayores demandas de los chiapanecos.
De hecho, se eligió bautizarlo con el nombre “XIV de Septiembre” para conmemorar la fecha en que hace 200 años los chiapanecos tomaron la decisión de ser parte de México.
Por si fuera poco, se anunció que con el respaldo del gobernador Eduardo Ramírez el próximo año se arrancará con un programa piloto para el aseguramiento de artesanos, artistas, trabajadores de la cultura, músicos y marimbistas, con el objetivo de garantizar el acceso a la seguridad social a este sector históricamente excluido.
Segundo, se inauguraron dos estaciones ferroviarias del Corredor Interoceánico, conocida como Línea K, una en Arriaga y otra en Tonalá, desde donde se podrá viajar en tren hasta Coatzacoalcos.
Muchas son las ganancias de esta obra, que al conectar el estado chiapaneco con el comercio internacional a través del Puerto Chiapas y el Ferrocarril del Istmo, impulsará la inversión en sectores como agroindustria, farmacéutica, electrónica y energías renovables, y al integrar la red ferroviaria de la Línea K con el puerto y el aeropuerto de Tapachula, se está creando una red logística más eficiente que implica el embarque y desembarque de mercancías de Asia, América y Europa.
Igualmente, generará miles de empleos directos e indirectos y facilitará el comercio nacional e internacional de productos locales como el café, plátano, mango y pescado, y se estima que conforme vayan avanzado los Polos de Desarrollo de Tapachula se reduzca la migración de chiapanecos y mejore la calidad de vida de las comunidades en el sureste del país.
Estos proyectos de gran envergadura sin duda alguna cerrarán la enorme brecha de desigualdad y subsanarán décadas de abandono y atraso social en beneficio de nuestra entidad.
RECONOCIMIENTO
La pregunta es por qué hasta ahora se están llevando a cabo estas acciones.
La respuesta no es simple, sin embargo hay una causa que no escapa al sentido común: la confianza de la presidenta Sheinbaum en el gobernador Eduardo Ramírez, por lo cual ha decidido implementar nuevas estrategias y una mayor inversión en proyectos, programas sociales y obras de infraestructura vanguardistas.
No es para menos. La administración de Ramírez Aguilar está entre los mejor calificados a nivel nacional y es el que mayor resultados ha obtenido entre los gobiernos emanados de Morena en diversas materias.
Por ejemplo, en educación ha impulsado el mayor programa de alfabetización jamás conocido, “Chiapas Puede”, con el cual pretende eliminar el analfabetismo en el estado, que en el momento que él asumió el control del gobierno estaba en el primer lugar nacional.
De igual manera, creó la beca Rosario Castellanos y el programa “Conecta Chiapas”, que ofrece servicio gratuito de internet para estudiantes de bachillerato y nivel superior. Y ha destinado una inversión importante en la construcción de nuevas aulas de clases y la mejora de espacios e instalaciones educativas. Sin olvidar el programa “Ver para aprender mejor”, que consiste en la entrega de lentes a estudiantes que lo necesitan.
También ha invertido en el mejoramiento de infraestructura urbana, vías de comunicación como caminos y carreteras; rehabilitación, modernización y reestructuración de unidades médicas en distintos municipios; fortalecimiento de sectores productivos como el turismo y la agroindustria; entrega de microcréditos; programas de capacitación para mujeres emprendedoras, entre otras acciones.
Pero, sin lugar a dudas, su gestión destaca en el combate a la delincuencia y el restablecimiento del Estado de Derecho. A través del nuevo modelo de seguridad (Fuerza de Reacción Inmediata Pakal) ha logrado pacificar a Chiapas, colocándolo en menos de seis meses de su mandato en el segundo lugar nacional con la mejor percepción de seguridad.
Hoy por hoy, Chiapas registra los menores índices de delitos de alto impacto y delitos generales del país. Por eso los ciudadanos viven confiados, los municipios que fueron golpeados por el crimen organizado han recuperado su actividad económica, han llegado nuevas inversiones, las familias desplazadas regresaron a su lugar de origen e incluso, a diferencia de otros estados que se vieron inmersos en caos por el megabloqueo de transportistas, aquí todo transcurrió con normalidad.
En resumen, toda la inversión y esfuerzo de la Federación en tiempos actuales se debe a la relación de confianza entre el gobernador Eduardo Ramírez y la presidenta, quien reconoce su desempeño y ve en Chiapas una verdadera transformación, con más salud, más progreso y más seguridad.
yomariocaballero@gmail.com




