Después de Carlos Manzo, el nombre de Grecia retumba en las paredes de Palacio Nacional. El municipio de Uruapan, Michoacán, es hoy, quizá, el más conocido entre las más de dos mil regiones municipales que existen en el país. Pero no es un municipio cualquiera: es un territorio copado por el crimen organizado, donde el alcalde asesinado el pasado primero de noviembre, lejos de ser silenciado con su muerte, provocó el resurgimiento sin igual del Movimiento del Sombrero.
Sí, ese mismo que utilizaba el fallecido Carlos Manzo y que ha revolucionado conciencias; el estandarte que hoy portan miles de personas, no solo de Uruapan, sino de diversas latitudes, que lo han tomado como bandera de lucha para exigir paz y tranquilidad en México.
Grecia Quiroz, la viuda y sombra de Carlos Manzo, de la noche a la mañana se ha empoderado y adueñado no solo de los reflectores, sino de esa ansia infinita de justicia que tienen atorada en la garganta miles de hombres y mujeres que han perdido a sus hijos, hijas, nietos, nietas, hermanos o hermanas, o que aún no los encuentran y permanecen en las carpetas judiciales como desaparecidos.
Grecia, una mujer menuda que ahoga su grito de dolor mostrándose férrea y combativa frente al poder, pero con un semblante sereno, tan distinto al de los políticos tradicionales que azotan la mesa o gritan para decir que “están presentes, encabezando la lucha contra las injusticias”.
Hoy, Grecia, a pocos días de estar bajo la luz pública, ha mostrado carácter, seriedad, honestidad y firmeza para liderar a su pueblo, para exigir que la paz retorne y para que los culpables de la muerte de su esposo sean enjuiciados.
Ya ha dado al menos tres nombres de posibles enemigos que pudieran estar detrás del asesinato de Carlos Manzo. El de Leonel Godoy, un experredista que hoy está infiltrado en la nómina burocrática de la Cuarta Transformación, es el más conocido. Él no ha dicho una sola palabra sobre la acusación que pesa en su contra, misma que Grecia hizo pública horas antes de reunirse con Omar García Harfuch.
La situación empieza a ponerse “color de hormiga” y, por tanto, este camino que ha tomado el desenlace fatal de Manzo, en lugar de infundir miedo o preocupación entre la gente de Uruapan, se ha convertido en un motivo excepcional para levantar la voz.
El enojo y la rabia se hicieron presentes en la reciente marcha que inundó las calles de Uruapan. La respuesta casi inmediata del gobierno federal para atender la inseguridad en todo el estado de Michoacán ha sido notoria, aunque parece una copia fiel de la campaña contra el crimen organizado que enfrentó en su momento Enrique Peña Nieto.
Para Grecia, los resultados del combate al crimen organizado deben verse en un plazo de dos meses, no más. Esa sentencia resume la frustración de su pueblo. Pero hay algo más: el Movimiento del Sombrero, con Grecia al frente, ha ganado tantos adeptos en el país que la propia alcaldesa de Uruapan ha pedido calma, pues —dijo— la única organización válida es la que ella representa, por lo que no aprueba que en otras entidades fronterizas con Michoacán pretendan “llevar agua a su molino”.
Grecia sabe que el futuro de su movimiento social —más no político, aunque lo político vaya implícito— tiene con los pelos de punta a Morena en la entidad, donde ya se daban por absolutos ganadores en 2027. Además, se abre un flanco espinoso para el gobierno federal, ya que controlar el descontento social que se extiende por todo el país es una tarea titánica que buscarán diluir de inmediato.
Hoy, el camino que debe trazar la viuda Grecia Quiroz debe visualizarse no solo para 2027, sino también con reservas para trabajarlo rumbo a 2030. Aunque sería prematuro asegurarlo, es un tema que no debe dejarse en segundo plano, porque esto es como los matrimonios que se concretan a días de que la pareja se conoce: podría revolucionar la política y darle el tiro de gracia a la tiranía que ha emprendido la Cuarta Transformación en el país.
No es demencial ni desproporcionado el comentario. Lo cierto es que las semanas y meses por venir serán aciagos para un gobierno que busca atesorar todo el poder en el país. Los políticos de linaje del PAN, PRI y MC podrían verse rebasados con la llegada relámpago del Movimiento del Sombrero, que tiene en mente despertar conciencias mediante la protesta y el voto de castigo.
