Redacción / Diario de Chiapas
La tarde era soleada cuando UDS FC saltó al terreno de juego a calentar, y el Centro de Formación UDS se vestía de gala para recibir el compromiso de la fecha 10 de la Tercera División Profesional (TDP) ante los Chapulineros de Oaxaca.
Sin embargo, de la nada apareció una nube que oscureció al Pueblo Mágico de Comitán, presagiando lo gris que sería el resultado para los locales, pues a pesar de que UDS FC puso el futbol, la Diosa fortuna, los goles y sobre todo las patadas, estuvieron del lado de los visitantes.
Las malas noticias y los errores defensivos de los estudiantes iniciaron muy temprano, al minuto 6, se presenta una jugada de tiro de esquina para Chapulineros y en su intento por cortar la jugada, un elemento de los locales alcanza a peinar el balón cambiándole la trayectoria al arquero Yael Domínguez que nada pudo hacer para evitar el gol.
UDS FC siguió con el plan de ataque, llegadas por las bandas con Adiarán Pérez y Leiver Gordillo, contando con Jaime González como el más adelantado, pero las oportunidades más claras las tuvieron Diego Cruz, con un disparo que terminó en tiro de esquina y una incorporación de Alfredo Contreras que ingresó al área con balón dominado, pero al intentar definir su disparo coqueteó por toda la línea de gol y se fue por un costado de la portería.
Chapulineros no volvió a tener llegadas, sus estrategias eran jugar al contragolpe y al error de los universitarios y, al minuto 45, la segunda opción fue la que les dio frutos; José Gallegos, con más desesperación que idea, saca un disparo elevado a la portería local que Yael Domínguez no pudo fildear y el esférico termina incrustándose en la portería para el 2-0.
UDS FC salió con las revoluciones elevadas tratando de acercarse al marcador, y otra vez tuvieron sus oportunidades para anotar, pero los postes y las malas definiciones fueron las que evitaron que se aproximaran en el marcador.
Chapulineros seguía atrás esperando a los rivales, y en repetidas ocasiones tuvieron que recurrir al juego brusco para detener a los jugadores de UDS FC, pues así lo demuestran las seis tarjetas amarillas y las dos tarjetas rojas que se llevaron, y les salió barato.




