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El senador Luis Armando Melgar celebró la visión estratégica del gobernador Eduardo Ramírez Aguilar (ERA), quien ha mostrado su interés en implementar un proyecto de suministro de gas que conecte desde el municipio de Reforma hasta Tuxtla Gutiérrez, una iniciativa que, de concretarse, significará un detonante histórico para el desarrollo económico y social de Chiapas.
“Aplaudo esta iniciativa porque representa progreso, seguridad energética y justicia social para miles de chiapanecos. Con este proyecto, no solo se fortalece la competitividad del estado, también se abren oportunidades de inversión, empleo y bienestar para nuestra gente”, afirmó Melgar.
El legislador subrayó que el acceso a energéticos modernos y sostenibles es un factor determinante para el crecimiento de la industria, el comercio y la vida cotidiana de las familias. Con este gasoducto, Chiapas daría un paso decisivo hacia un modelo energético más eficiente, que permita reducir costos de producción y mejorar la calidad de vida.
Melgar señaló que, en la Nueva ERA, la política energética debe verse como un pilar de la transformación:
• Competitividad industrial: atraer inversiones nacionales e internacionales.
• Impulso al empleo: generación de miles de trabajos directos e indirectos.
• Bienestar familiar: acceso a energía más económica y segura.
• Sustentabilidad: disminución en el uso de combustibles más contaminantes.
“Chiapas no puede quedarse al margen del desarrollo. Este proyecto nos conecta con las grandes oportunidades del futuro, coloca al estado en el mapa energético nacional y asegura un horizonte de crecimiento para nuestros hijos”, puntualizó Melgar.
Melgar destacó que la iniciativa de Eduardo Ramírez refleja un gobierno de visión, humanismo y cercanía con la gente, que entiende que el progreso debe traducirse en bienestar tangible para todas las familias chiapanecas.
El senador reiteró su respaldo absoluto al gobernador desde el Senado de la República y llamó a la ciudadanía, empresarios y autoridades a sumarse a este esfuerzo con unidad y compromiso.
“La transformación de Chiapas requiere pasos firmes y valientes. Con proyectos de este calibre, demostramos que sí tenemos con qué construir un futuro próspero, seguro y justo. El gasoducto Reforma–Tuxtla será un símbolo de la Nueva ERA, donde pueblo y gobierno trabajan como uno solo”, finalizó Melgar.